La Concertación Democrática Nicaragüense (CDN), lamenta la grave situación que enfrentan los habitantes de las comunidades indígenas y afrodescendientes de la Regiones Autónomas de la Costa Caribe, donde a diario crece la invasión de colonos que los despojan de sus tierras e incluso han provocado masacres ya que usan armas de guerra.
De manera especial nos preocupa la destrucción de la reserva biológica de Bosawas y sus alrededores, ya que tal como lo han denunciado dirigentes de la zona, de mantener el ritmo actual, provocará que en menos de dos décadas la nación mayangna y misquita desaparezca.
La situación es tan grave que hace pocos días, durante el 55 periodo de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN por su sigla en inglés), presentó un informe en el que concluye que a partir de 2018, el régimen Ortega Murillo con apoyo de funcionarios de la zona y simpatizantes partidarios, ha “cometido violaciones y abusos de los derechos colectivos de los pueblos indígenas y las comunidades afrodescendientes”, de las regiones Norte y Sur de la Costa Caribe.
Según el informe del GHREN estas violaciones incluyen el derecho a la libre determinación, la autonomía, el autogobierno, el consentimiento previo, libre e informado, el derecho de participación; y violaciones y abusos del derecho a sus tierras y recursos.
Aunque el GHREN confirma que a partir de 2018 estas violaciones se incrementaron sistemáticamente, estas datan desde 2014 cuando inició el despojo de las tierras por parte de los colonos con apoyo de operadores políticos que el régimen Ortega Murillo mantiene en los Gobiernos regionales. Líderes indígenas y ocho guardabosques que el régimen mantiene encarcelados, han denunciado que grupos armados en complicidad con la Policía y el Ejército, han obligado a comunidades enteras a abandonar sus
territorios.
La CDN pide el apoyo de los gobiernos y organismos defensores de derechos humanos y medio ambientales, para obligar al régimen Ortega Murillo a cesar la violencia contra las poblaciones indígenas y afrodescendientes y a frenar el deterioro de la reserva biológica de Bosawas considerada el pulmón de Centroamérica.