De una idea cívica a un movimiento democrático

Lo que actualmente denominamos Concertación Democrática Nicaragüense CDN-Monteverde, se conoció inicialmente como grupo Monteverde, en alusión al lugar de Costa Rica donde, en 2021, se realizaron los primeros encuentros. Somos la prolongación de una iniciativa que, primero construyó confianza entre un grupo de nicaragüenses creyentes en la democracia.

Pero a partir de enero del 2024, después de dos años de negociación y consenso, nos transformamos en un actor de concertación política, integrado por organismos diversos, tanto de tipo político como social e individuos que participan a título personal. Nos conformamos para liderar una estrategia política con acción en varias áreas primordiales. Esta concertación aspira a aglutinar a la mayor cantidad posible de actores cívicos, para que juntos consolidemos una coalición política diversa incluyente de las principales voces prodemocráticas de Nicaragua.

Líneas de acción de Monteverde

La CDN trabaja en la consolidación de una alternativa política que defina la ruta pacífica para salir del régimen Ortega-Murillo, y el tránsito hacia la restauración de la democracia, apegados a los principios y procedimientos democráticos y apoyados en la pluralidad inclusiva, la tolerancia, la igualdad, el respeto al Estado de derecho y las libertades civiles y políticas. Paralelamente fortalecemos nuestra función de interlocutores ante la comunidad internacional.

La definición de esa ruta pacifica nos permitirá salir de la dictadura Ortega-Murillo y es la prioridad de la CDN, ya que esa es la única forma de poner fin a la represión totalitaria que impera en Nicaragua. Esta situación que desde 2018 a la fecha ha provocado decenas de asesinatos, encarcelamientos, el mayor exilio registrado en la historia de Nicaragua, la desnacionalización de más de trescientos dirigentes políticos, sociales, periodistas y sacerdotes, y un sin número de violaciones a los derechos humanos. La represión traspasa las fronteras nicaragüenses en busca de sus víctimas, a las que se les niegan documentos de identidad, ingresar a su país, les cierran cuentas bancarias o les impiden tenerlas.

De esta represión totalitaria no han escapado las autoridades religiosas ya que más de doscientos sacerdotes y monjas católicas, entre ellos los obispos, Rolando Álvarez e Isidoro Mora, han sido desterrados, la mayoría de ellos después de meses o años de encarcelamiento injustificado. También acechan a la Iglesia Evangélica y atacan a sus pastores. Recientemente trece miembros del ministerio evangélico Puerta de la Montaña, fueron condenados por supuestos delitos de lavado de dinero y crimen organizado.

Mientras tanto, la corrupción impera a costa del pueblo, el régimen endeuda al país para beneficiar a una élite excluyente y aprovecha las remesas para facilitar la represión y extorsión.

En el campo económico la situación también es dramática, actualmente los niveles de pobreza, informalidad laboral, desempleo y desigualdad, se han incrementado y convertido en una causa más que impulsa la migración masiva de los nicaragüenses. Entre 2018 y 2023, en al menos tres países, el número de nicaragüenses acogidos como refugiados o asilados políticos asciende a 346,000. Adicionalmente las autoridades estadounidenses reportan que entre 2018 y febrero de este año 423,052 nicaragüenses cruzaron irregularmente la frontera de ese país.

Toda esta realidad justifica nuestra lucha por una transición hacia la democracia. Para alcanzar estas metas, impulsamos un modelo de concertación que facilite la ampliación de las alianzas y capacidades, y fortalecer un espacio de resistencia pacífica, que ofrezca soluciones a la crisis actual y alternativas futuras para la Nicaragua post Ortega.

Como parte de esta estrategia hemos formado grupos de trabajo que están conectados con las redes de apoyo en el interior del país, y a la vez, impulsan acciones de incidencia a nivel internacional para generar presión externa en contra del régimen.

Somos un espacio plural en busca de una Nicaragua donde alcancemos y podamos prosperar todos.